Yogurito es un alimento que contiene lactobacilo probiótico 1505. Refuerza el sistema inmunológico, por lo que previene infecciones intestinales y respiratorias. Fue desarrollado en Tucumán, por investigadores de Conicet y Cerela.
Yogurito es un alimento que contiene lactobacilo probiótico 1505 por lo que presenta beneficios para la salud superiores a los de un yogur convencional. Con sabor a vainilla y frutilla, es un producto lácteo funcional de última generación. Fue desarrollado por investigadores de Conicet y Cerela (Centro de Referencia para Lactobacilos).
La iniciativa, que acerca los beneficios de la ciencia y la tecnología a la población infantil de alta vulnerabilidad, surgió en Tucumán, en el año 2003. En ese momento, los índices de desnutrición infantil en la provincia eran altos.
Desde su inicio, en 2008, el proyecto mantuvo un crecimiento constante. Se comenzó a proporcionar en 50 escuelas y, actualmente, se distribuye en 500. De modo que unos 300.000 niños se benefician del probiótico 1505.
Los probióticos son, principalmente, bacterias lácticas reconocidas como seguras para el ser humano y los animales. Para que sean consideradas como tales deben reunir algunos requisitos básicos como sobrevivir al pasaje gastro-intestinal y llegar al intestino en cantidades suficientes para ejercer efectos positivos en la salud.
El consumo de este tipo de bacterias en alimentos potencia la acción de antiparasitarios. Estos agentes contribuyen a disminuir la morbilidad infantil, pues reducen el número y tipo de parasitosis. Ésta patología presenta una mayor prevalencia en la infancia y se agrava en poblaciones con necesidades básicas insatisfechas.
Algunas de las propiedades del probiótico 1505 son las siguientes:
En diciembre de 2019, el gobierno argentino lanzó el Plan Argentina Contra el Hambre. La iniciativa pone énfasis en todas aquellas acciones que constituyan soluciones inmediatas a problemáticas estructurales que impactan en el estado sanitario de la población, tales como la deficiencia alimenticia, pobreza o desocupación.
Para acometerlo, el poder ejecutivo solicitó el compromiso de instituciones nacionales de ciencia y técnica como Conicet. En este marco, las autoridades de la entidad contemplan que Yogurito sea incorporado al Plan.
En diálogo con Océano Medicina, la investigadora de Conicet y Cerela, Graciela Font, explicó las características del producto y el contexto de su surgimiento.
– ¿Cómo surgió la idea de desarrollar Yogurito?
-Comenzamos a desarrollar la idea-proyecto y a interesar a actores de la vida pública que se comprometieron y apoyaron la propuesta. En 2007, con financiamiento del MINCyT (ex SECyT), del CONICET y del gobierno de Tucumán (SIDETEC) se evaluaron los beneficios del consumo de un yogur enriquecido con el probiótico Lactobacillus rhamnosus CRL 1505 (que luego llamaríamos Yogurito) en una población de 300 niños.
¿Qué organismos participaron en su implementación?
-En 2008, el gobierno de Tucumán, a través del Ministerio de Desarrollo Social, y con la participación del Ministerio de Educación y de Salud, lo incluyó en los programas alimentarios de la provincia.
-En los sectores vulnerables, debido al alto consumo de hidratos de carbono hay graves problemas de obesidad en los niños, ¿cómo contribuiría este desarrollo a reducir este problema?
-El consumo de Yogurito y su presencia en la provincia desde hace 11 años ha contribuido a desarrollar en los niños hábitos de nutrición saludable. Se ha logrado, en parte, gracias a nuestra presencia constante en las escuelas, a través de talleres de concientización para niños y docentes, con participación de Ministerio de Desarrollo Social de la provincia. En estos talleres se difunden conceptos de probióticos y sus beneficios para la salud. Asimismo, mencionamos la importancia de incorporar nuevos paradigmas de alimentación, que impliquen reducir el consumo de harinas y azúcares.
Yogurito sólo se encuentra en el mercado social, es decir, se suministra en el marco de programas alimentarios en escuelas públicas. “Existen empresas interesadas en su producción comercial, pero el objetivo es que no pierda su sentido social, por ejemplo, bajo la premisa de precios cuidados”, dice Font y subraya que el objetivo es que los beneficios del probiótico 1505 lleguen a las familias y a personas de la tercera edad.
-¿Hay posibilidad de que Yogurito se incorpore en las escuelas a nivel nacional?
-Hay posibilidades de su incorporación a nivel nacional. De hecho, otras provincias ya lo incluyen en sus programas alimentarios, como Santiago del Estero, Entre Ríos, Misiones y el Municipio de Luján, aunque en menor medida que Tucumán. Sin embargo, el éxito de la incorporación de este programa solidario a mayor escala, con llegada a diferentes provincias del país, requiere el apoyo del estado nacional.
CONICET
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