Loading...

Información, datos y testimonios de calidad formativa para tu crecimiento

Da tu primer paso hacia nuevos conocimientos. Cursos 100% online para profesionales de la salud.

“El cáncer de testículo se debe atender sin perder tiempo”

El Dr. Esteban Casabé, urólogo especializado en oncología, asegura que el rápido diagnóstico del cáncer de testículo beneficia el pronóstico del paciente.

Imagen del articulo

El Dr. Esteban Casabé, urólogo especializado en oncología, asegura que el rápido diagnóstico del cáncer de testículo beneficia el pronóstico del paciente

La velocidad es un tema clave en todo lo vinculado al cáncer de testículo. Así lo asegura el doctor Esteban Casabé, especialista en urología general y oncológica y miembro titular de la Sociedad Argentina de Urología, quien alerta que este tipo de afección no solo suele presentarse de manera rápida e inesperada sino que, también, debe ser atendida con rapidez por el médico para poder garantizar la supervivencia del paciente.

Aunque se trata de un tipo de cáncer poco común, y por tanto poco conocido por muchos pacientes, resulta fácil de identificar, por manifestarse, generalmente, con el crecimiento y endurecimiento repentino y desproporcionado de uno de los testículos, algunas veces con presencia de dolor.  Casabé exhorta a los hombres a acudir de inmediato al médico en esos casos y, con fuerza, llama a los galenos a actuar “sin perder tiempo” en la operación del testículo afectado para poder aspirar a los mejores resultados.

—¿Cuál es el grupo etario con mayor riesgo de padecer cáncer de testículo?

El grupo etario es el que se encuentra entre los 18 y 40 años de edad. Si a mi consulta asiste un hombre en esas edades y me dice que el testículo le pesa más o le aumentó de tamaño, ya yo estoy pesando en qué lugar lo opero, inmediatamente.

¿Por qué tal determinación?

Porque las distintas células que causan el tumor de testículo tienen mucha potencia. Son células muy fuertes. En un chico de 20 años (puede ser de 40, pero sobre todo de 20 a 30 años), son células que crecen con mucha velocidad. El último caso que operé fue un señor de 38 años que vino acá un día y me dijo: “Doctor, estoy preocupado: el viernes me puse un pantalón chupín, de esos adheridos al cuerpo. Llegué a mi casa, me lo saqué, me fui a dormir y el sábado me lo quise poner de vuelta y no me subía. Tenía una pelota en los testículos ¿qué hago?”. Le dije “vente urgente”. Vino ese día, lo revisé y era un tumor en el testículo. Le saqué sangre para marcadores y lo operé en pocos días. Es algo que tienes que atender sin perder tiempo.

¿Qué pasa si la operación no se hace de inmediato?

El principal riesgo es que el tumor haga metástasis y que el paciente muera. Piensa que si esa persona un viernes en la noche se sacó el pantalón sin problema y el sábado en la mañana no ha podido subirlo, es muy poco tiempo el que tenemos para actuar.

Según la American Cancer Society, los síntomas del cáncer testicular avanzado son:

  • Dolor en la espalda baja provocado por la propagación del cáncer a los ganglios linfáticos (grupos en forma de fríjol de células del sistema inmunológico) en la parte trasera del abdomen
  • Dificultad para respirar, dolor en el pecho o tos (incluso toser sangre) se puede presentar a causa de la propagación del cáncer a los pulmones
  • Dolor en el vientre, ya sea a causa de ganglios linfáticos agrandados o porque el cáncer se ha propagado al hígado
  • Dolores de cabeza o confusión, debido a la propagación del cáncer al cerebro.

¿Cómo se realiza el diagnóstico y el tratamiento?

El primer paso es sacar sangre para medir los marcadores, para tener una idea de qué tumor es.

Segundo paso, operarlo, directamente. La cirugía se hace través de la ingle, donde uno exterioriza el testículo. Si se tiene la opción de hacer una biopsia por congelación en el quirófano, obviamente que se hace, es lo ideal.  Pero si uno tiene la duda, no espera. Entonces, suponiendo que podamos hacer la biopsia, que es lo que corresponde, sacamos un pedacito de la parte que nos parece tumoral, se la mandamos al patólogo y él nos dice si es cáncer o no. Seguimos con la orquiectomía y luego con la orquidofuniculectomía, que es sacar el cordón inguinal junto con el testículo.

Paso siguiente: ese paciente seguramente se va a ir de alta en uno o dos días y lo que hay que hacer es estadificar, ver hasta dónde llega el tumor, si se esparció o no. Lo que hacemos es una tomografía completa, que se conoce como pantomografía. Mientras tanto, vamos a tener seguramente el nombre y apellido del tumor: si es un seminoma, teratoma u otro tipo de tumor, y con cada uno se evalúa de forma el tratamiento que se hace. El cáncer de testículo se puede tratar  con radioterapia, quimioterapia según estirpe, o a veces con los dos.

—¿Cuál es la tasa de sobrevida?

Es bastante alta, si tienes un diagnóstico temprano. Y sigue siendo alta si tienes a un paciente diseminado al que logras hacerle una remisión completa. Obviamente,  no es la misma la evolución de un seminoma -que es uno de los tipos de tumores- que un teratoma, que es más agresivo.

—¿Se ve afectada la fertilidad del paciente tras la operación?

No, la fertilidad no está afectada porque el paciente siempre tiene el otro testículo. Lo que yo recomiendo siempre, no por la cirugía en sí, sino por el tratamiento que viene luego con la radioterapia y la quimioterapia, es “guardar” esperma. Algunos ya tienen hijos y no tienen problema, pero muchos no han tenido o quieren seguir teniéndolos. Así, si este paciente quiere la opción de usar sus espermatozoides, siempre tendrá su reserva para hacer una fertilización in vitro.

—¿Qué tan difícil le resulta dar una noticia de este tipo a un paciente?

Yo me dedico a esto, así que doy malas noticias todos los días. Creo que el paciente antes de oír la noticia ya sabe lo que tiene. Hay algo adentro que le hace saber que no está bien lo que está pasando. Muchos se asustan por la palabra cáncer, les dan miedo, no la quieren decir. Lo importante es poder llegarle a la gente, poder explicar que es una enfermedad más, aunque obviamente conlleva tratamientos difíciles como la quimioterapia, pero también es bueno demostrarle al paciente que la vida sigue. Hay que acompañarles en todo el proceso, incluso en esos casos donde se pierde la batalla.

Factores de riesgo:

La American Cancer Society considera que hay pocos factores de riesgo que aumenten las posibilidades de que un hombre padezca cáncer de testículo. Aun así, menciona los más comunes (aunque la persona con cáncer de testículo puede no presentar ninguno):

  • Testículo no descendido o criptorquidia (uno o ambos testículos no bajaron del abdomen hasta el escroto antes del nacimiento)
  • Antecedentes familiares de cáncer testicular
  • Infección por VIH
  • Carcinoma in situ (CIS) del testículo
  • Haber tenido cáncer de testículo antes
  • Pertenecer a determinada raza o grupo étnico (hombres de raza blanca tienen cuatro a cinco veces más riesgo que hombres de raza negra y asiáticos).
  • Tamaño corporal (algunos han encontrado que hombres de alta estatura tienen mayor riesgo de padecer cáncer de testículo)

doctores

Dr. Esteban Casabén

Especialista en urología oncológica.

Jefe de trabajos prácticos en la Universidad de Buenos Aires

Especialista jerarquizado en urología

Miembro Titular de la Sociedad Argentina de Urología.

Miembro del Subcomité de Oncología de la Sociedad Argentina de Urología

Miembro de la Confederación Americana de Urología.

Miembro Internacional de la American Urological Association

SEGUÍ ESPECIALIZANDOTE
Contenido exclusivo incluido en nuestros planes de estudio para enfermeros
Conocé mas sobre todo lo que incluyen nuestras membresias QUIERO SABER MÁS
Fuente/s:

COMENTARIOS

0 0 Votos
Calificación
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios